Los gatos callejeros forman parte del paisaje de muchas ciudades. E, incluso, del atractivo turístico, como sucede en algunos rincones de Roma, por ejemplo. No obstante, la superpoblación está provocando problemas medioambientales y sanitarios. Y obligando a los responsables municipales y colectivos a tomar medidas.
Muchos gatos callejeros son antiguos gatos domésticos, abandonados o perdidos, que regresan a un cierto grado de estado salvaje. Se agrupan en colonias, al aire libre o en inmuebles abandonados. Y se reproducen a gran velocidad, gracias a su fertilidad y a la capacidad de las hembras para finalizar su ...