Para muchas personas, los inseparables son una mascota perfecta por su pequeño tamaño, su inteligencia y la alegría que contagian. Si te lo estás planteando, te damos algunas pautas sobre cómo cuidar un agaporni y que éste se críe sano y feliz.

El nombre de este ave proviene de las palabras griegas ágape (amor, afecto) y ornis (ave). Y es conocido por los fuertes lazos que establecen macho y hembra. Ambos pasan mucho tiempo juntos y la soledad no les sienta bien.

Aunque los agapornis criados a mano pueden tener una vida larga y solitaria, hazte con una pareja si puedes. Y en caso de que uno fallezca, intenta buscarle un compañero.

Entorno limpio y espacioso

Esto te obligará a disponer de una jaula espaciosa, en la que tus mascotas puedan volar. Tienes que limpiarla a diario para evitar enfermedades e infecciones por bacterias, y lavarla a fondo dos veces al mes.

Para ello, debes sacar los distintos elementos –pechas, comederos, juguetes…- y frotarlos bien con un estropajo, agua y un producto especial para jaulas. A la hora de fregar los bebederos, puedes ayudarte con un cepillo de dientes.

No olvides cambiar el agua todos los días, ya que a estas mascotas les gusta beber agua fresca. También agradecen una zona de baño en la que poder asearse.

Los agapornis son pájaros inteligentes y muy activos. Necesitan pechas de ejercicio y juguetes en su jaula que les estimulen física y mentalmente. De esta forma, fomentarás su desarrollo y evitarás comportamientos violentos o autolesivos.

También necesitan volar libremente y con regularidad dentro de casa, para mantenerse en plena forma.

Agapornis es un género de aves psitaciformes de la familia Psittaculidae cuyos miembros son nativos de África, así que les gusta la luz y el calor.

En verano, saca la jaula al exterior para que tomen el sol, aunque la exposición no debe ser muy larga. En invierno, utiliza una bombilla ultravioleta de 5 W al menos 3 horas al día.

Asimismo, ten cuidado con las corrientes y los cambios de temperatura. Los agapornis son muy sensibles a las mismas.

Alimentación variada

Si sabes cómo cuidar un agaporni mediante una alimentación saludable, éste puede vivir hasta 15 años. Son aves que precisan una dieta variada, en la que no pueden faltar los alimentos frescos.

Cada día debe ingerir, además de su mixtura de semillas recomendada, una cucharada sopera de frutas, hortalizas y vegetales cortados a daditos, combinando 3 ó 4 tipos.

Le puedes ofrecer manzana, pera, naranja, uvas, melón, sandía, melocotón, plátano,… Así como lechuga, acelga, pepino, pimiento, zanahoria, calabacín, judías verdes o maíz. También tiene que comer legumbres –germinadas- una vez por semana.

Hay que retirar los restos de comida fresca por la noche para evitar que que se acumulen suciedad y bacterias.

Respecto a los alimentos secos, han de tomar diariamente una cucharada de postre de pienso específico o mezcla de semillas.

También hay una lista de alimentos prohibidos, que son tóxicos y pueden llegar a causarles la muerte. Entre ellos, la patata, calabaza, berenjena, leche y lácteos, carnes, dulces, sal, cacao, café, té y alcohol. También los alimentos procesados para humanos y las hojas, huesos, semillas y pieles de algunas frutas.

Cómo cuidar un agaporni papillero

¿Sabes cómo cuidar un agaporni cuando es un polluelo? Necesita comer una papilla específica, que le proporciona todos los nutrientes básicos.

Como ocurre con los bebés, hay que prepararle una nueva en cada toma y tirar lo que sobre. No debe tener grumos. Y no debe estar ni líquida, ni espesa; ni fría, ni caliente. Se le dan 4-5 ml con una jeringuilla (sin aguja).

Es muy importante revisar el buche del animal papillero antes de alimentarlo para ver si lo ha vaciado completamente. De lo contrario, corre el riesgo de empacho o atragantamiento.

En caso de duda, consulta con un veterinario experto en aves exóticas cómo cuidar un agaporni e introducirle paulatinamente nuevos alimentos.