¿Cómo hacer que tu perro pare de ladrar a tu orden? Parece difícil ¿verdad? El ladrido es un problema muy común resulta hasta francamente muy molesto cuando por cualquier cosa tu perro empieza a ladrar como un loco sin importar lo que hagas para que el se calle. Puedes gritarle o darle un pisotón al suelo muy fuerte para asustarlo pero el al escuchar el ruido se empeñara en ladrar más y más fuerte. Este simple comportamiento se ha convertido en unos de los motivos por que algunas personas abandonan sus mascotas (junto a la agresividad).

Cuando no se consigue que paren tratamos de estar de ellos lo más lejos posible, mientras más lejos mejor. No obstante hay métodos para evitar el ladrido excesivo de tu perro incluso los hay para que deje de ladrar cuando tú quieras, básicamente se trata de recompensar su silencio.

Que el perro esté ejercitado

Uno de las pautas que se repiten en la mayoría de los consejos de modificación de la conducta de un perro es el de asegurarse que hace el ejercicio necesario para sentirse bien, que quema toda la energía que le sobra, que tiene juguetes para entretenerse y la compañía necesario para que no se sienta abandonado.

ladrar

Los detonantes del ladrido

También es súper importante que visualices o averigües cuales son los estímulos externos que llevan a tu perro a ladrar. Puede ser que alguien llame a la puerta, que pase por delante de la ventana el gato del vecino o el simple hecho de ver que te mueves. Si eres consciente de los detonantes que desencadenan el ladrido sabrás cuando ocurrirán y podrás detenerlo antes de que empiece.
Pongamos un ejemplo por el jardín pasa volando un pájaro a tu perro se le enciende el instinto de cazador y se hincha a ladrar y muchas veces comienzan a rasgar la puerta, es momento de que entres en acción captando su atención llamándolo por su nombre, dándole la orden de que se calle (puede ser «silencio», «calla» o incluso el nombre del perro) y muéstrale una golosina para cachorros. Un perro siempre quiere una golosina así que lo más seguro es que deje de ladrar y corra a buscar su premio. Si no ha dejado de ladrar no lo recompenses; míralo con firmeza y repite la orden. Si sigue ladrando, gírate y dale la espalda para que entienda que con esa actitud no conseguirá nada. Cuando calle (y solo cuando calle) puedes dale el premio.

Por normal general no se trata de algo complicado, aunque puede llegar a ser pesado. A veces los perros dejan de ladrar cuando los llamas con fuerza por su nombre, con lo que el trabajo sería menor, pero siempre es positivo enseñarle a obedecer la orden de «silencio».

Resumen del ejercicio

Para resumir, el método se trata básicamente de esto: cuando el perro ladre, llámalo, dale la orden para que calle y, cuando lo haga, recompénsalo con una golosina.
Al principio lo ideal es que comiences con golosinas para captar más rápido su atención pero luego puedes variar con halagos y caricias. Lo importante es que se sienta premiado con esto no evitaras que ladre, pero si harás que guarde silencio a tu orden lo que en cierto modo es mucho mejor.