¿Es cierto que los perros detectan enfermedades que padecen sus dueños? ¿Se les puede entrenar para descubrirlas y prevenir determinados episodios? Las investigaciones demuestran que sí.

El Centro de Perros Trabajadores de la Universidad de Pensilvania inició en 2013 un programa para detectar cáncer de ovarios. Para ello, entrenan perros y utilizan muestras de sangre y tejidos donados por pacientes.

Dos años antes, en 2011, la revista Gut del grupo British Medical Journal recogió los resultados de un estudio de la Universidad de Kyushu (Fukuoka, Japón) con un perro labrador.

El animal detectó las muestras de aliento y heces correspondientes a enfermos con cáncer colorrectal. Algunos enfermos estaban en fase inicial y otros, en avanzada.

No obstante, los pioneros en este campo fueron los británicos Hywel Williams y Andres Pembroke. Los doctores realizaron estudios con pacientes cuyos perros olfateaban determinadas zonas del cuerpo. Los resultados fueron publicados en 1989 por la prestigiosa revista The Lancet.

Células cancerígenas

Si los perros detectan enfermedades, es porque su agudo sentido del olfato se lo permite. Estos animales cuentan con 300 millones de receptores olfativos en sus hocicos, mientras que los humanos tenemos cinco millones.

Esto provoca que su olfato sea hasta diez mil veces superior al nuestro. Es decir: nuestro amigo detecta un olor diez mil veces más débil que el que nosotros podríamos percibir.

Por ello, puede oler en el aliento, orina y heces del enfermo los compuestos orgánicos volátiles de las células cancerígenas. Asimismo, otros estudios apuntan que los perros también pueden advertir si los enfermos de epilepsia van a sufrir un brote. O predecir episodios de alergia.

Esta facultad ha inspirado investigaciones en torno a la creación una nariz artificial. El objetivo es que ésta detecte el olor de los compuestos volátiles en el aliento de los enfermos. Pero aún no existe un aparato que emule las facultades de nuestros amigos.

Detección de diabetes

Los primeros estudios acerca de si los perros detectan enfermedades se iniciaron por la reacción espontánea de alguna mascota. El animal olfateó el cáncer de su dueño y supo hacerse entender.

No obstante, es preciso entrenar a los perros para que puedan descubrir enfermedades mediante su olfato. Para utilizarlos en medicina, hay que enseñarles qué olor específico queremos que distinga de entre todos los que percibe.

Una de las enfermedades con las que se está trabajando es la Diabetes Tipo I. En España, hay centros como Argus que se dedican al adiestramiento de perros de detección. Es decir, aquéllos capaces de encontrar y mostrar lo que previamente se les pide que localicen.

En esta línea, esta entidad y otras, como la Fundación Bocalán, estudian la capacidad de los perros para captar las subidas o bajadas de azúcar.

Aún no está claro lo que realmente detectan los perros de alerta médica. El detonante puede ser la presencia de tasas elevadas de insulina, de tasas bajas de azúcar o la aparición de otras sustancias.

Pero lo cierto es que los perros lo perciben y son capaces de avisar ante un inminente ataque o shock insulínico. No obstante, éstos se adiestran como un complemento extra de seguridad, no como sustituto del medidor de glucosa.

Migrañas

Otras investigaciones se centran en si los perros detectan enfermedades como la migraña. Su percepción precoz puede ahorrar al que la padece horas de intenso dolor.

Algunos animales pueden olfatear un brote con horas de anticipación, al distinguir variaciones en el olor de la serotonina. Esta sustancia química se eleva cuando el organismo va a sufrir un ataque.

Si el paciente se trata antes de que se desencadene la migraña, puede reducir las dosis de medicación y evitar dolores incapacitantes.